lunes, 24 de junio de 2013

Los espejos paralelos. Néstor Luján.

El encuentro en Burdeos del caballero español Antonio Pimentel, conocido por su embajada ante la reina Cristina de Suecia, con un amigo inglés sirve de introducción a la novela, formada por el entrelazamiento de las vidas de los personajes de Las meninas velazqueñas; el pintor Benito Manuel de Aguero queda accidentalmente encerrado en un aposento del Alcázar con el cuadro de Velázquez y, durante la noche, a manera de visiones o sueños, reviven los personajes pintados: la infanta Maria Teresa que va a casarse con Luis XIV de Francia, el aposentador Nieto, Felipe IV, ya viejo y enfermo, que escribe a sor María de Ángreda, su confidente, y la reina doña Mariana, enanos, damas, meninas y el mastin León. Todos ellos nos cuentan su vida, dejan entrever cómo eran la Corte, Madrid y la España de aquel entonces, y la novela termina con la voz del propio Velázquez hablando de su cuadro. En este gran recreación imaginativa, Néstor Luján ha conseguido una estampa histórica de singular intensidad, brillantisima y rebosante de verdad humana.

1 comentario:

  1. Es muy interesante,gracias por invitarme a tú blog, ya te he añadido al mio, junto con los otros, un saludo,

    ResponderEliminar